La cirugía plástica también es cosa de hombres

La cirugía plástica también es cosa de hombres

Como se imaginarán, a lo largo de estos años he visto en el consultorio a todo tipo de personas. En su mayoría, mujeres. Hace 10 años, los hombres que cruzaban el umbral de la puerta de la consulta venían acompañados (o traidos) por sus parejas o, los más jóvenes, por sus mamás. Todos con la misma actitud de “me muero de la vergüenza, esto no es para hombres de verdad”, me dijo uno. Sin embargo, desde hace ya algunos años, son más y más los caballeros que vienen solos a la consulta y mucho más seguros, más confiados… más empoderados en este campo, y con mucho menos miedo a las agujas y bisturí.

 

Dependiendo de la edad, las dos operaciones más demandadas por los hombres son rinoplastía (nariz) y párpados superiores e inferiores.

 

Los motivos son múltiples. Evidentemente el quererse ver bien y corregir algo que los viene molestando desde hace un tiempo; pero, también está la necesidad de que los perciban jóvenes y alertas en sus centros de labores. Principalmente en los casos de hombres entre 45 – 60 años. Aunque no sea justo, en muchas empresas, la juventud “visible” tiene un impacto importante en cómo se percibe la fortaleza para desempeñar un cargo. Un hombre con los párpados caídos y bolsas en los ojos, da la impresión de estar cansado, avejentado; y eso, le puede jugar en contra (laboralmente hablando) en un mundo altamente competitivo.

 

Recientemente, observo la asistencia de hombres bastante jóvenes en la búsqueda de métodos de prevención de la aparición de arrugas, envejecimiento de la piel, etc. Estos son milenials muy informados y decididos en lo que quieren.

 

El mundo seguirá cambiando, y nosotros estaremos preparados.

 

Saludos cordiales,

 

Dr. Roni Luna