3 Dudas “veraniegas” tras un aumento de mamas

3 Dudas “veraniegas” tras un aumento de mamas

Muy bien, llegó el verano!, y con él una serie de dudas normales que surgen en aquellas pacientes que se han sometido o están por someterse a un aumento mamario.

 

Antes de empezar, lo primero que deben saber es que NO ES RECOMENDABLE ir a la playa (o piscina) durante las primeras 4 a 5 semanas luego de operarse. Recuerde, el éxito de los resultados de su cirugía, también dependen de usted!!.

 

Dicho esto, estas son las 3 dudas más recurrentes:

 

1) ¿Puedo nadar en el mar o la piscina?.

Algunas pacientes indican que tienen una “sensación rara” cuando van a nadar a una piscina o en el mar. Usualmente un poco de tensión en el pecho, o que la prótesis se mueve “raro”. Es totalmente normal, pues al nadar, se estarán movilizando los músculos del pectoral de una forma no usual y eso puede presionar la prótesis un poco. Nada de qué asustarse. Pasará inmediatamente.

 

2) ¿Me debo poner bloqueador debajo de la ropa de baño?.

Recomendaría que si. La razón es simple, el objetivo es que la cicatriz (por más pequeña que sea) esté totalmente protegida; y aunque la mama estaría cubierta por la tela de la ropa de baño (y eso ya es protección), no vaya a ser que, por cualquier motivo la mama y cicatriz queden expuestas. Así que, es mejor prevenir en exceso en este caso. Además, la piel de todo el pecho estará más sensible, así que si es el primer verano con prótesis, asegúrese que el bloqueador sea de un índice de protección alto y aplíquelo en todo el pecho.

 

3) ¿Qué tipo de bikini debería usar?.

Si usted se operó recientemente, su bikini o ropa de baño debe tener la misma fuerza de sujeción que el brassiere post-quirúrgico que le indicó su médico. Si le indicaron que su sujetador no tenga push-up… pues su bikini tampoco debe tenerlo!.

 

Finalmente, les recomiendo no mantener la ropa de baño mojada por mucho tiempo. Esto para preservar la cicatriz y que esta no se macere.

 

Disfrute su verano con responsabilidad!

 

Saludos cordiales,

 

Dr. Roni Luna